La nueva Ley de Bienestar Animal en la que trabaja el Gobierno prohibirá la cría de mascotas a particulares, la compra de animales en tiendas, buscará el abandono 0, y propone la reconversión de los zoos en lugares de cría autóctona en cautividad.
Esta noticia ha sido celebrada por las personas y las asociaciones que luchan por los derechos de los animales, ya que el bienestar de los animales es muy importante.
«Hay que concienciar a la gente, sobre todo en el tema de abandonos, adopciones… Concienciar a la población de que los animales no son un capricho y tener claro que si acogemos uno es hasta el final y no solo cuando nos interese», señala Cristian González colaborador de Provolan.
Que el Gobierno esté trabajando en una norma que vele por el bienestar animal es una buena noticia para estas organizaciones. «Aunque todavía está muy verde, es muestra de que vamos avanzando», señala Isabel Martín, presidenta de la protectora de animales Huellas De Ávila.
Uno de los objetivos de la norma, es el «sacrificio cero» y, para ello, una de las claves es el «abandono 0». Para ello buscará establecer un mayor control de estos animales coordinado entre las 17 CCAA de la procedencia y datos de cada animal que se compre o se recoja en una protectora.
También se controlará que los particulares no tengan más de cinco animales en su hogar y quienes quieran tenerlos deberán registrarse como núcleos zoológicos. En el caso de que un particular cuente con cinco o más mascotas cuando se apruebe la ley, no estará fuera de la ley pero no podrá adquirir más.
La norma también prevé un registro nacional de inhabilitados para la tenencia y trabajo con animales de compañía. Siguiendo esta línea, también se regulará a quienes trabajan con animales, que también quedarán registrados, ya que deberán estar formados en criterios de positividad razonados y con una formación concreta.
«La cría estará exclusivamente permitida a profesionales registrados» y se limitará el número de camadas dependiendo de la necesidad de núcleos zoológicos y establecimientos, todo ello «supeditado a un control veterinario» ha destacado el director general de Derechos de los Animales, Sergio G. Torres.
Del mismo modo, se regulará el sacrificio animal, que sólo se permitirá «a excepciones vinculadas a situaciones eutanásicas«, explicitado «bien» en la norma, que «no exista la posibilidad de que alguien, por cuestión de saturación del centro o por comportamiento del animal, pueda acceder a la vía del sacrificio»
Además se prohibirá la cría de especies no autóctonas incluidos los zoológicos, que «dejarán de poder comprar animales, sobre todo grandes mamíferos y cetáceos». El objetivo, ha explicado el director general, es la «reconversión de estos espacios» como centros de «reintroducción de especies autóctonas»
El borrador de esta ley salió a consulta pública el pasado 6 de octubre y se espera que en noviembre llegue al Consejo de Ministros. Por lo que si todo va bien entrará en vigor en enero de 2023.