Cristina Rodríguez trabajaba como funcionaria en la oficina de Correos y Telégrafos de Monforte de Lemos (Lugo) y hace un año falleció de cáncer.
Solo existen palabras de gratitud para Cristina Rodríguez. Esta mujer gallega, exempleada de la oficina de Correos y Telégrafos de Monforte de Lemos (Lugo), falleció en febrero de 2022. No tenía familia. Tampoco marido, ni hijos. Su madre y su mejor amiga murieron de cáncer y esta enfermedad fue la que años más tarde le arrebató la vida también a ella. Por eso tenía tan claro lo que quería hacer con su dinero.
Su última voluntad fue que los 200.000 euros que había conseguido ahorrar durante años de trabajo se destinaran a la investigación contra el cáncer. ¡Dicho y hecho! ¡Objetivo cumplido! La mitad de esa cantidad está en manos de la Asociación Contra el Cáncer de Lugo y la otra mitad en la asociación Mensajeros de la Paz, del Padre Ángel.
Gracias a esta aportación, se va a poder financiar un estudio que trata de desarrollar nuevos fármacos contra la metástasis en tumores de pulmón. Esta acción solidaria ahora solo arranca sonrisas entre los médicos e investigadores que se emplean diariamente en la lucha contra esta dolencia.
Según sus vecinos, Cristina era generosa y siempre ayudaba a los demás. No se quedó de brazos cruzados ni siquiera durante la pandemia. Cuentan que en esos meses los trabajadores de un circo se quedaron “atrapados” en una finca delante de su casa y que ella llamaba al supermercado y hacía compra para que se la enviasen. Esta mujer gallega es un ejemplo de altruismo que merece ser reconocido.